Por qué el hígado es un superalimento (y las mejores formas de incluirlo en tu dieta)

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En muchas tribus y culturas indígenas de todo el mundo, el hígado ha sido durante mucho tiempo un alimento apreciado y famoso. Valorado por sus beneficios nutricionales, la gente transformaba el hígado en platos únicos y sabrosos, desde el hígado picado y el hígado con cebolla hasta el paté de hígado. Parece que a mucha gente le encanta el hígado o lo odia. Sea cual sea tu postura, es indiscutible que el hígado es uno de los superalimentos más nutritivos que puedes encontrar, e incluso si no eres el mayor fan de su sabor, hay formas de disfrazarlo y cocinarlo para que puedas seguir aprovechando sus beneficios.

title El perfil nutricional del hígado

El hígado es un órgano vital que se encuentra en animales y seres humanos y que se encarga de filtrar toxinas, almacenar vitaminas y mucho más. Durante cientos de años, las vísceras han sido la fuente de nutrientes preferida, pero hoy en día la mayoría de la gente prefiere las carnes de músculo. Los hígados más consumidos son los de vaca, pollo y cordero.

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El hígado tiene menos grasa que el filete o las chuletas de cordero. También es bajo en calorías pero rico en nutrientes como vitamina A, B12, hierro, folato, cobre, colina y vitamina B2 (riboflavina).

title ¿Por qué el hígado es un superalimento?

Incluso comparado con nuestras queridas frutas y verduras de colores, el hígado es la fuente de nutrición superior e impresionante que realmente proporciona casi todos los nutrientes que su cuerpo necesita. El hígado contiene incluso pequeñas cantidades de vitamina C.

Sólo una pequeña porción de hígado le proporciona más del 100% de su ingesta diaria recomendada (IDR) para la mayoría de los nutrientes necesarios. Gota de micrófono. Para ponerlo en perspectiva, una pequeña porción de 68 gramos de hígado de ternera aporta 19,8 gramos de proteínas, 338 miligramos de fósforo y 239 miligramos de potasio. Por eso se considera un superalimento y se consume en numerosas culturas de todo el mundo. Por ejemplo, una ración de hígado de buey aporta alrededor del 1.620% de la IDR de cobre, que interviene en el funcionamiento del cerebro y el metabolismo del hierro.

Estos importantes nutrientes tienen funciones específicas en el organismo. El folato es necesario para el crecimiento celular y la formación del ADN, y la vitamina B2 es necesaria para la función y el desarrollo celulares.

Necesitas proteínas de alta calidad para desarrollar los músculos, reparar las células, el buen funcionamiento del sistema inmunitario y mucho más. El hígado de buey es una excelente fuente de proteínas de alta calidad y aminoácidos esenciales que debes obtener de tu dieta. Comer hígado de buey es una forma fácil de nutrir tu cuerpo con todos estos aminoácidos esenciales de un solo alimento. Se ha demostrado que una mayor ingesta de proteínas aumenta la tasa metabólica. Las proteínas también son saciantes y te mantienen lleno durante más tiempo.

title ¿Y el colesterol?

Aunque el hígado tiene un alto contenido de colesterol, las investigaciones han demostrado que el colesterol de la dieta no afecta significativamente a los niveles de colesterol en el torrente sanguíneo, lo que demuestra que hay algo más en el panorama del colesterol. La creencia popular era que el colesterol de los alimentos provocaba enfermedades cardiacas, pero cada vez hay más pruebas de que no es así en la mayoría de las personas.

En lo que respecta a las cardiopatías y el colesterol alto, es probable que intervengan otros factores, como el estrés, las infecciones, la inflamación y el azúcar. El colesterol asociado a las cardiopatías se produce principalmente en el organismo. Cuando se consumen más alimentos ricos en colesterol, el organismo produce menos para compensar y mantener el equilibrio.

Según la investigación, comer hígado no elevará los niveles de colesterol; sin embargo, la pequeña parte de las personas sensibles al colesterol de los alimentos podría necesitar limitar su ingesta.

title Cómo incluir el hígado en tu dieta

Disfrute del hígado y la cebolla fritos a la antigua, o pruebe un suave paté de hígado sobre crujientes galletas de pan francés o una cazuela de hígado, bacon y cebolla. Un paté de hígado es un complemento gourmet para tu bandeja de queso y verduras. También puede añadir hígado a platos con mucha carne, como el pastel de carne, o disfrutar de un salteado con hígado junto con su carne favorita.

Si no te gusta su sabor, puedes disimularlo mezclando el hígado en albóndigas o hamburguesas. Puedes remojar el hígado en zumo de limón antes de cocinarlo y añadir tus hierbas y condimentos favoritos para rebajar el intenso sabor.

El hígado es más asequible que muchos otros tipos de carne, y si lo que buscas es alimentar tus células con una nutrición sólida, el hígado sin duda te da un golpe por tu dinero. Se puede encontrar en la mayoría de carnicerías y tiendas de comestibles. Muchos entusiastas de la salud creen que el hígado orgánico de animales salvajes y criados en pastos es una opción más limpia y saludable.

El hígado sigue siendo muy apreciado en muchas culturas, tribus y círculos de la salud y la forma física. Aunque puede que ya no sea tan popular como antes, está claro que el hígado se merece el título de superalimento y, como cualquier otro superalimento, el hígado puede formar parte de una dieta equilibrada y rica en nutrientes.

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