Si el aceite es el pilar de la dieta mediterránea, será por algo. Hoy te explicamos por qué es importante tomar aceite de oliva.
- Mejora la salud cardiovascular debido a los ácidos grasos insaturados que contiene y que reducen el colesterol malo y aumentan el bueno.
- Mejora la digestión y protege el aparato digestivo del exceso de ácidos del estómago. También evita el estreñimiento.
- Contiene antioxidantes que refuerzan las células.
- Ayuda a reducir la hipertensión.
- Mejora la absorción del calcio, el zinc y el magnesio, lo que contribuye al crecimiento óseo.
- Es estable a altas temperaturas, lo que lo convierte en ideal para cocinar porque se reduce mucho el riesgo de que desprenda sustancias tóxicas o grasas trans.
- Hay estudios que aseguran que la gente que toma aceite de oliva obtiene mejoras cognitivas al cabo del tiempo.
- Uno de sus componentes, el oleocantal, le dota de cualidades antiinflamatorias parecidas a las del ibuprofeno.
- Da sensación de saciedad, lo que es fundamental si estás intentando perder peso.
La dosis recomendable que se debe tomar al día es de unos 40 gramos, es decir, de dos a tres cucharadas.