La Roca" revela su lucha contra la depresión: "No quería estar ahí".
Por fin se está abriendo el debate sobre la salud mental masculina. Esta semana, uno de los protagonistas más trabajadores de Hollywood se ha unido con valentía al coro cada vez más numeroso de famosos que revelan sus continuas luchas internas y, contraviniendo directamente su eslogan mundialmente conocido, lo cierto es que sí importa.
Dwayne Johnson es una de las estrellas de cine mejor pagadas del mundo, el orgulloso propietario de una envidiable colección de relojes y el aún más orgulloso propietario de uno de los hombros más malvados de la industria. Pero ahora, el macho por excelencia de Hollywood ha revelado con valentía su lucha constante contra la depresión durante una aparición en el podcast The Pivot .
De este modo, Johnson se une a un coro cada vez mayor de celebridades masculinas -entre las que se incluyen, aunque no exclusivamente, estrellas de superhéroes de Marvel y leyendas de la NRL- que se suman a la creciente conversación sobre la salud mental de los hombres y a los esfuerzos más amplios por normalizar las luchas internas y sus efectos en nuestra vida cotidiana.
Esta avalancha de celebridades refleja una crisis mundial de salud mental en la que los problemas de Australia son especialmente agudos: casi la mitad de los australianos padecerán enfermedades mentales a lo largo de su vida y Australia es el segundo país de la OCDE con mayor consumo per cápita de antidepresivos, mientras que muchos celebran la inminente legalización de las terapias psicodélicas.
En el vídeo, Johnson recuerda que su primer encuentro con la depresión tuvo lugar "allá en Miami", cuando la aspirante a estrella iba al instituto: "No quería ir a clase, no hice ningún parcial... simplemente me fui". Sin embargo, un aspecto de esta primera lucha es especialmente revelador: Johnson sufría una lesión en el hombro...
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Al relacionar explícitamente el ejercicio físico regular con la salud mental, Johnson explica que "no estaba haciendo ejercicio" debido a su lesión y notó un deterioro correlativo en su salud mental: "Como atleta, cualquier tipo de sudor y de ejercicio te ayudará a sacar esa m*erda de ti". No es de extrañar, por tanto, que en los últimos años la alocada rutina matutina de Johnson, que incluye un entrenamiento matador, se haya convertido en algo innegociable.
Tras sufrir otro episodio de depresión años más tarde, cuando se divorció de su primera esposa Dany García, Johnson admite que el mayor problema al que se enfrentó durante sus primeras luchas no fue necesariamente la depresión en sí, sino el hecho de que "no sabía lo que era... no sabía lo que era la salud mental". En 2017, la depresión volvió a aparecer, pero Johnson había encontrado la manera de superarla...
