Ir andando al trabajo tiene muchos más beneficios de los que puedas imaginar. Vale que tendrás que levantarte antes para llegar a tiempo, pero a cambio reducirás el riesgo de padecer diabetes, hipertensión y obesidad, entre otras patologías. ¿Te compensa?
Si vas andando al trabajo tendrás menos riesgo de padecer diabetes que aquéllos que utilicen el coche u otros medios de transporte, según afirma un estudio desarrollado en Reino Unido y publicado en el American Journal of Preventive Medicine. Hacer ejercicio de forma habitual, aunque sea de baja intensidad, tiene beneficios tanto inmediatos (liberar tensiones, perder peso) como a largo plazo. Por ejemplo, ir andando o en bicicleta habitualmente también disminuye las posibilidades de que padezcas enfermedades cardiovasculares, como ataques al corazón.
Las posibilidades de padecer diabetes en un futuro se reducen a la mitad si utilizas la bici en vez del coche para desplazarte al trabajo.