Anímate a saltar a la comba

¿Sabías que cinco minutos saltando a la comba pueden quemar tantas calorías como 20 minutos de running? A veces lo más sencillo es lo mejor. A la comba se puede saltar en cualquier lugar, sin necesidad de equipamiento específico y además, recuerda a la niñez.

La comba mejora la resistencia cardiovascular y tonifica todo el cuerpo, además desarrolla el equilibrio, la coordinación, la agilidad y el cronometraje. Esta actividad también ayuda a desarrollar la fuerza explosiva en los gemelos, y su impacto sobre las articulaciones es mucho menor que en otros deporets, pues la distancia con el suelo es menor, y las piernas están más relajadas.


Empezar a practicarlo es sencillo. Puedes comenzar con una sesión de diez minutos e ir incrementándola. Cuando te aburras puedes combinarla con otros deportes pero nunca sin abandonarla.

Lo que es importante es mantener la postura correcta: los codos lo más cerca posible del cuerpo y balancea la cuerda utilizando solamente las muñecas, no los brazos. Para reducir el impacto sobre los tobillos y los pies, salta a una altura justo suficiente como para superar la comba, no más. Aterriza sobre la parte anterior del pie y baja los talones para absorber el choque.

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