Dona el hígado a su sobrino y se retira del fútbol
El futbolista Alejandro Benítez ha sacrificado su carrera para donar su hígado a su sobrino y salvar su vida.
El futbolista argentino Alejandro Benítez, uno de los mejores jugadores del Central Larroque, de Entre Ríos, acaba de convertirse en todo un héroe al tomar una de las decisiones más importantes de su vida. El hijo de su hermana mayor, Milo, había nacido con problemas en el hígado y necesitaba un donante. Su padre no era compatible y a su madre no le permitieron donar por haberse operado recientemente del corazón. El hígado de su tío Alejandro se convirtió en la única opción para que el bebé pudiera sobrevivir, una decisión que al futbolista no le costó tomar.
“Cuando me lo dijeron ni lo dudé. Tenía claro que debía abandonar el fútbol, pero no me importó. Es más, jamás me voy a arrepentir de lo que hice”, explica el deportista.
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La operación se realizó en el hospital Austral de Pilar y, debido a algunas complicaciones, duró más de lo esperado, unas siete horas. Pero aún fue más dura la operación del pequeño Milo, que pasó doce horas en el quirófano. Afortunadamente, todo salió bien y el bebé se encuentra en el hospital evolucionando favorablemente y más rápido de lo esperado.
Aunque la operación no le obligaba a Alejandro a abandonar el fútbol, sí sabe que es arriesgado. Primero tendría que pasar por una larga recuperación y, una vez retomada su carrera, se arriesgaría en cada partido ha recibir un golpe en la zona afectada que podría ser fatal.
Pero parece que dejar el fútbol no es un problema para Alejandro Benítez si puede disfrutar el resto de su vida junto a su sobrino. Tras ser dado de alta, su ciudad lo recibió como a un héroe.
