Guía para correr a pesar del calor

 

Correr o morir en el intento. El calor del verano el problema principal para los runners en esta época del año. Muchos desisten, pero otros, héroes de la resistencia, persisten en su deporte. Te damos una guía para correr a pesar del calor.

 

Lo primero que debes variar para correr en verano son los horarios. Olvídate de correr con el sol golpeándote en la cara. Elige horas muy tempranas de la mañana –antes de las ocho- o por la noche, casi a medianoche, que es cuando las temperaturas suelen dar un respiro. Pero sobre todo en zonas costeras vigila también el índice de humedad, que puede dejarte seco antes de comenzar tu entrenamiento.

 

En este tiempo hay que planificar el recorrido mejor que nunca. Nada de correr en mitad de un secarral, por mucho que te guste. Es preferible escoger una ruta en la que te asegures la presencia de fuentes de agua potable o de tiendas en las que puedas comprarlas. Otra opción es que dejes, como Pulgarcito, botellas de agua a lo largo del recorrido, pero ésta es más engorrosa.

 

Y es que el punto más importante de esta guía es la hidratación, porque te vas a deshacer en sudor. Por cada hora de ejercicio normalmente hay que beber entre medio y un litro de líquidos. Ahora en verano puedes beber más y sobre todo sustituir el agua por bebidas para deportistas, con la que reponer todos las sales minerales que perderás con el sudor.

 

Por último, no olvides llevar la ropa adecuada, de color claro y holgada, para que el calor se refleje y el aire pueda circular. Un consejo extra es poner un poco de hielo bajo la gorra, que al ir derritiéndose te dará una sensación de frescor constante durante más de media hora.

 

Si sigues al pie de la letra esta guía seguirás sufriendo más de lo normal al correr durante el verano, pero al menos será algo más llevadero.

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