Thor Bjornsson deja el boxeo y afronta un nuevo reto

Hafthor "Thor" Bjornsson sorprendió a muchos de sus seguidores cuando, tras ganar el premio al hombre más fuerte de Islandia por décimo año consecutivo, anunció que dejaba el strongman y se reciclaba como boxeador. Tres años después, y tras perder 45 kilos, venció a su compatriota Eddie Hall en "el combate más pesado del mundo". Pero en un par de vídeos recientes en su canal de YouTube, Bjornsson hace otro anuncio sobre su carrera y lo que le depara el futuro.

"En realidad, es muy difícil hablar de esto", dice. "He tomado la decisión de dejar el boxeo, de no volver a competir en boxeo, de decir adiós al boxeo y simplemente no volver a pelear. Tuve una buena racha, ya sabes, lo hice durante dos años y medio, y fue bonito hacerlo, porque al principio cuando empecé había mucha gente que no creía en mí, mucha gente que decía que era lento, que era esto, que era horrible.... Y no pasa nada, todo el mundo empieza en algún sitio, son principiantes, y yo era un principiante en el boxeo. Pero demostré que mucha gente se equivocaba trabajando duro... Demostré que la gente estaba equivocada, e hice que la gente se sintiera orgullosa. Y eso fue muy satisfactorio para mí".

Sin embargo, admite que a pesar de respetar el boxeo y a sus compañeros, la verdad es que "la pasión nunca estuvo realmente ahí" a pesar de lo profundamente que se comprometió con el deporte, y que todo el proceso se convirtió en una rutina incesante. "No soy un gran fan del cardio, creo que lo he dejado claro", afirma.

Así que ha reevaluado cómo quiere emplear su tiempo, y ahora persigue dos nuevos objetivos.

El primer objetivo es batir uno de sus propios récords mundiales. Este fin de semana, en el Rogue Invitational de Texas, pretende establecer un nuevo récord de peso sobre barra. Inicialmente lo batió allá por 2019 en el Arnold Strongman Classic, cuando lanzó 55 libras sobre una barra de 20'2", y confía en poder mejorarlo. "Le di unos años esperando que alguien lo rompiera, pero nadie fue capaz", dice. "Así que creo que ya es hora de que bata este récord mundial y luego, quién sabe, quizá tenga que volver al strongman y batir mi propio récord mundial de peso muerto".

El segundo anuncio de Bjornsson es que vuelve a su verdadera pasión, levantar objetos pesados, y participará en competiciones de powerlifting. Más concretamente, se ha fijado el objetivo de levantar un total de 1.000 kg (2.204 libras) en sentadilla, press de banca y peso muerto.

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