Las niñas que juegan con muñecas ultradelgadas son más propensas a tener problemas de imagen corporal, según un estudio
Las muñecas ultrafinas podrían ser perjudiciales para la imagen corporal de las niñas, según un nuevo estudio.
Los investigadores observaron a niños de 5 a 9 años que jugaban con muñecas de diferentes tipos de cuerpo y descubrieron que las niñas que jugaban con muñecas ultra delgadas eran más propensas a querer cuerpos delgados, según un estudio publicado el miércoles en la revista Body Image.
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Las muñecas ultradelgadas representan una fuente de ideales de delgadez, lo que podría conducir a una insatisfacción corporal a largo plazo en las niñas, dijo la autora del estudio, Lynda Boothroyd, profesora y directora de investigación del departamento de psicología de la Universidad de Durham (Reino Unido).
"La insatisfacción corporal en la infancia puede persistir en la adolescencia y más adelante" y puede contribuir al aumento de peso y a los trastornos alimentarios, dijo.
Se preguntó a treinta participantes sobre su tamaño corporal percibido e ideal mediante imágenes en un ordenador antes de permitirles jugar con muñecas, ya sean ultradelgadas o de aspecto infantil realista.
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Después de que las niñas jugaran con las muñecas ultrafinas o infantiles durante cinco minutos, respondieron a las mismas preguntas sobre la imagen corporal. El índice de masa corporal ideal de las niñas se redujo significativamente después de jugar con las muñecas ultrafinas, pero no hubo cambios significativos si jugaron con las muñecas infantiles.
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Los resultados del estudio no sorprendieron a Boothroyd. Dijo que ya había visto otros estudios sobre cómo el tamaño de las muñecas puede alterar los ideales corporales, "aunque me dio una gran sacudida emocional ver los resultados en pantalla la primera vez". Su estudio se suma a las pruebas que demuestran que la exposición a juguetes que representan el cuerpo femenino de forma poco realista afecta negativamente a las niñas.
Para una parte del estudio, se pidió a algunos de los sujetos que jugaran con una muñeca infantil o con coches de juguete después de haber jugado con una muñeca ultrafina. Los resultados mostraron que incluso jugar con una muñeca realista después no contrarrestaba el cambio negativo en su imagen corporal ideal observado después de haber jugado con las muñecas ultrafinas.
Imagen corporal y salud mental
La insatisfacción corporal también puede ser un factor de predicción de otras consecuencias negativas, según Charlotte Markey, profesora de psicología de la Universidad Rutgers de Nueva Jersey, que no participó en el estudio.
"La imagen corporal no es sólo una preocupación superficial, sino que está asociada a la salud mental de las personas en general", dijo Markey.
Algunos padres están dejando de lado las muñecas delgadas. Markey dijo que cuando su hija era más pequeña, tenía una "regla de no Barbie".
Cuando su hija le preguntaba por una muñeca Barbie, Markey le explicaba por qué no iba a comprarla. Hablar de la imagen corporal con sus hijos a una edad temprana "puede tener consecuencias positivas duraderas", dijo.
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Scott Granet, director de la Clínica de Trastorno Obsesivo Compulsivo-Trastorno Dismórfico del Norte de California, sí permitía a su hija tener muñecas Barbie mientras crecía. Granet, que no participó en el estudio, dijo que si tuviera una hija pequeña hoy, le permitiría tener muñecas delgadas con moderación.
"También me gustaría comprarle otras muñecas con cuerpos más realistas para que tenga una mayor sensación de lo que es más normal", dice Granet.
